Hay libros que han dejado una huella permanente. Este es el caso de El factor 4, que en realidad es un informe que encargó el Club de Roma y que constituye un manual sobre EFICIENCIA ENERGETICA: disponemos de la tecnologÃa para hacer un uso más eficiente de la energÃa y los materiales sin perder calidad de vida. Aunque el informe va más allá y se atreve a demostrar que podemos duplicar el bienestar mundial usando la mitad de los recursos naturales. Increible pero cierto.
En su momento, este informe nos mostró una parte del camino hacia la sostenibilidad: la revolución de la eficiencia energética. Evidentemente, no era la única opción, pero sin duda era una opción sensata, posible y viable. Pero no era sólo un libro de ejemplos, sino también un alegato para la necesaria reconstrucción social, que pasa por la rehabilitación del hecho polÃtico, del social, del cultural y del ecológico. Por este motivo, incitaba a descubrir el bien común, a saber vivir juntos y a convivir con la naturaleza. Por ello, el mensaje de El factor 4 era precisamente el de redefinir nuestro papel frente a la biosfera. Para ello sus autores, lÃderes de dos instituciones de vanguardia -el Instituto para el Clima, Medio Ambiente y EnergÃa de Wuppertal (Alemania) y el Rocky Mountain Institute (Estados Unidos)- se esforzaron no sólo en poner ejemplos, sino también en poner las bases éticas para esta nueva revolución. Y por ello señalaban que la eficiencia es el arte de usar los mÃnimos recursos en un trabajo determinado.
En su momento, este informe nos mostró una parte del camino hacia la sostenibilidad: la revolución de la eficiencia energética. Evidentemente, no era la única opción, pero sin duda era una opción sensata, posible y viable. Pero no era sólo un libro de ejemplos, sino también un alegato para la necesaria reconstrucción social, que pasa por la rehabilitación del hecho polÃtico, del social, del cultural y del ecológico. Por este motivo, incitaba a descubrir el bien común, a saber vivir juntos y a convivir con la naturaleza. Por ello, el mensaje de El factor 4 era precisamente el de redefinir nuestro papel frente a la biosfera. Para ello sus autores, lÃderes de dos instituciones de vanguardia -el Instituto para el Clima, Medio Ambiente y EnergÃa de Wuppertal (Alemania) y el Rocky Mountain Institute (Estados Unidos)- se esforzaron no sólo en poner ejemplos, sino también en poner las bases éticas para esta nueva revolución. Y por ello señalaban que la eficiencia es el arte de usar los mÃnimos recursos en un trabajo determinado.
El factor 4 es el paradigma ideológico de la revolución de la eficiencia. El ingenio y la tecnologÃa se convierten en protagonistas de una obra que destila, a pesar del paso de los años, una sensatez todavÃa pendiente.
El factor 4 hace años que ya no está disponible en las librerÃas y por ello hay que buscar en las bibliotecas su disponibilidad. Sin embargo, en el año 1998 la Fundación Tierra editó una sÃntesis en catalán, disponible en formato PDF, dentro de sus monografÃas de educación ambiental Perspectiva Ambiental.
El factor 4 hace años que ya no está disponible en las librerÃas y por ello hay que buscar en las bibliotecas su disponibilidad. Sin embargo, en el año 1998 la Fundación Tierra editó una sÃntesis en catalán, disponible en formato PDF, dentro de sus monografÃas de educación ambiental Perspectiva Ambiental.
El factor 4 constituye una obra clave para comprender un momento en el camino hacia la sostenibilidad ambiental. No era la solución a los problemas, aunque nos ayudaba a ganar tiempo dejando claro que la eficiencia energética no solucionaba los problemas planetarios, pero permitÃa crear nuevos mecanismos incentivadores y sustituir aquellos que generaban ineficiencia y descontento.
La lectura de El Factor 4 nos sitúa frente a un escenario que ya habÃa sido predecido por el informe Más allá de los lÃmites del crecimiento, del Instituto Tecnológico de Massachusetts, que advierte que, de seguir aumentando el crecimiento económico mundial al ritmo actual, llegarÃamos a la obsolescencia planetaria. Hoy, la realidad nos indica que la solución pasa por la eficiencia del crecimiento económico y la simplicidad vital. Tenemos pendiente la revolución de la eficiencia. Por ejemplo, todavÃa se venden electrodomésticos ineficientes cuando disponemos de la tecnologÃa para reducir más el consumo energético de los mismos. Mientras no avanzamos hacia una nueva concepción socioeconómica, los autores de El Factor 4 argumentan la importancia de adoptar un nuevo modelo económico: el ecocapitalismo, capaz de utilizar los mercados en beneficio del principio de la sosteniblidad ecológica. En definitiva, una lectura imprescindible para adentrarse en el optimismo y la sostenibilidad práctica.
Para terminar, recordemos que ya en el año 1996 los autores argumentaban que, para estabilizar las emisiones de efecto invernadero, debÃamos reducir un 60 % las mismas. Hoy, los más optimistas -como George Monbiot- señalan que deberÃa ser del 90 %. Cuánta literatura acumulamos cuando tenemos la respuesta frente a nosotros: cambiar de estilo de vida para que las futuras generaciones puedan seguir simplemente sobreviviendo.
La lectura de El Factor 4 nos sitúa frente a un escenario que ya habÃa sido predecido por el informe Más allá de los lÃmites del crecimiento, del Instituto Tecnológico de Massachusetts, que advierte que, de seguir aumentando el crecimiento económico mundial al ritmo actual, llegarÃamos a la obsolescencia planetaria. Hoy, la realidad nos indica que la solución pasa por la eficiencia del crecimiento económico y la simplicidad vital. Tenemos pendiente la revolución de la eficiencia. Por ejemplo, todavÃa se venden electrodomésticos ineficientes cuando disponemos de la tecnologÃa para reducir más el consumo energético de los mismos. Mientras no avanzamos hacia una nueva concepción socioeconómica, los autores de El Factor 4 argumentan la importancia de adoptar un nuevo modelo económico: el ecocapitalismo, capaz de utilizar los mercados en beneficio del principio de la sosteniblidad ecológica. En definitiva, una lectura imprescindible para adentrarse en el optimismo y la sostenibilidad práctica.
Para terminar, recordemos que ya en el año 1996 los autores argumentaban que, para estabilizar las emisiones de efecto invernadero, debÃamos reducir un 60 % las mismas. Hoy, los más optimistas -como George Monbiot- señalan que deberÃa ser del 90 %. Cuánta literatura acumulamos cuando tenemos la respuesta frente a nosotros: cambiar de estilo de vida para que las futuras generaciones puedan seguir simplemente sobreviviendo.
En definitiva, la EFICIENCIA ENERGETICA no es el futuro, es el presente si queremos seguir avanzando de forma sostenible.
Arturo MartÃn
CEO
Global Green Ingenieros S.L.
Edificio ARIETE.
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Calle Innovacion, 6-8.
Parque Empresarial PISA
E41927 Mairena del Aljarafe.
Sevilla
Spain
(www.grupoglobalgreen.es)
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